La seguidilla le pasó factura a Ramón

El amontonamiento de partidos de este torneo y la falta de rotación en el equipo pesaron notablemente en el último partido de "la Banda". La baja que más dolió en el último encuentro ante Belgrano fue la del "Lobo" Ledesma, pero también el cansancio se hizo evidente en jugadores importantes como Cavenaghi, Maidana, Vangioni y Mercado, entre otros. El cansancio vuelve a los jugadores imprecisos y débiles de piernas y hace que el equipo juegue a un ritmo mucho menor al que podría hacerlo. La duda es, ¿Debería haber puesto algunos suplentes Ramón en el Kempes? 

Foto: FPT

 A causa de la Copa del Mundo que se disputará a partir de junio, el torneo debe acortarse y deben jugarse algunos partidos entre semana. Esto ocasiona que, a veces, los equipos deban jugar partidos con una diferencia de un par de días y el desgaste físico es alto. Ese mismo desgaste físico venía siendo relativamente imperceptible para el Millonario... Hasta ahora.

 El cansancio parece haber explotado en el plantel riverplatense en la fecha del domingo pasado. Un equipo que venía de ganar tres partidos importantísimos a un ritmo destacable finalmente pagó la seguidilla de partidos con el físico atenuado. Si sumamos eso al estrés que ocasiona seguramente la responsabilidad de luchar por un campeonato en un grupo que no está acostumbrado a ser protagonista, se forma un cóctel letal que desemboca en jugadores borrados futbolísticamente de la cancha y la lesión del estandarte del mediocampo como lo es Cristian Ledesma.

 El Lobo, la columna vertebral de este River que juega como puede, tiene 35 años y garra de juvenil. En cada partido (si está enchufado) corre cada pelota como si fuese la última, acomoda al equipo con pases precisos y corta los avances del rival siempre que la ocasión lo amerita. Sin embargo, a los 35 años, probablemente nadie puede aguantar ese ritmo de juego en 4 partidos en 14 días, y finalmente sucedió algo previsible: Sufrió una contractura sobre el final del primer tiempo ante Belgrano y tuvo que ser reemplazado. Ingresó Matías Kranevitter que, si bien tiene un nivel extraordinario, no hizo pie en el partido y no pudo ocupar el vacío que dejó el Lobo en el medio de la cancha. Otro que se fue sentido fue Éder Álvarez Balanta, pero particularmente a causa de un golpe desafortunado con Marcelo Barovero.

 Por otro lado, hubo muchos jugadores que jugaron a una marcha menos que lo que un rival como Belgrano exige. Claro es el ejemplo de Gabriel Mercado, un defensor lateral que aunque no es muy claro en ataque suele proyectarse y había levantado mucho su rendimiento. En esta ocasión, se lo vio muy bajo de nivel e inclusive el primer gol de Belgrano vino por su sector, cuando él pasó al ataque y no pudo volver a tiempo en la contra del Pirata. El otro defensor lateral, Leonel Vangioni, jugó uno de los peores partidos desde que está en River, caso que sí sorprende porque había sido uno de los mejores jugadores del equipo el año pasado. Podría explicarse mejor su caso porque generalmente es un jugador que (como suele decirse) "deja un zurco por la banca izquierda" de tanto que sube al ataque y baja, pero hay que recordar que de los últimos 4 partidos jugó sólo 2 a causa de la suspensión por la patada contra All Boys.

 Sin embargo, lo más anticipable fue el desempeño del Torito Cavenaghi, ya que el oriundo de O'Brien, que supo brillar en el Más Grande, se encuentra en un estado físico muy cuestionado pero igualmente era una pieza importante en la delantera del equipo por su calidad ofensiva. Evidentemente con el correr de los partidos sus falencias fueron incrementando y el goleador no pudo hacer pie en el último encuentro.

 El punto fundamental del asunto no es caerle a los jugadores por no soportar la velocidad y dureza con que juegan otros equipos, sino plantear un tema que deberá tener Ramón Díaz en cuenta para el futuro. Nadie puede decir con seguridad qué hubiese pasado si al partido que perdió River en el Kempes lo hubiesen jugado algunos suplentes, pero quizás dejar una fecha de descanso para los que jugaron tantos partidos consecutivos, entre ellos varios experimentados con más de 30 años, hubiese sido una decisión sensata por parte del técnico. Más aún si se toma en cuenta que en el plantel hay jugadores jóvenes pero con ganas y muy capaces como el Keko Villalva, Matías Kranevitter, Federico Vega, Augusto Solari, Giovanni Simeone o Emanuel Mammana, entre otros. 

 Probablemente una rotación más presente, fluída y frecuente entre partido y partido sería una decisión lógica, pero todo depende de lo que ve el Pelado en la semana. Cualquiera sea el caso, lo que todo River quiere es que tanto los titulares como los suplentes puedan lucir en cada partido la Banda Roja como ésta lo merece.