Crónica de River 1(4)-Boca 1(2)
http://paladarmillo.blogspot.com/2014/06/cronica-de-river-14-boca-12.html
River le ganó a Boca en penales por 4 a 2, luego de haber igualado en 1 en los 90 minutos en el Estadio Azteca de México DF. El partido fue malo en líneas generales, con pocas llegadas y el empate había sido justo.
Por el lado de Boca, no tuvieron muchas llegadas en el primer tiempo, con la excepción de una escalada por derecha del juvenil Cubas que remató fuerte y al medio que Barovero tapó sin mucho esfuerzo.
El gol de River llegaría a los 36' por un excelente pase entre líneas cerca de mitad de cancha de Manu Lanzini para el Keko Villalva, que a base de velocidad se posicionó frente a Trípodi y definió cruzado para abrir el marcador.
Luego de la apertura del marcador, Boca empezó a animarse más a atacar pero sin mucho éxito ni remates claros.
Más tarde ocurriría la polémica: Tras una buena combinación de River que terminó en un pase a Vangioni a pocos metros del arco, el zurdo fue rozando con el brazo por el Cata Díaz y cayó en el área. El árbitro se tomó unos segundos para decidir y luego señalar el punto penal, indicando la pena máxima a favor de River. Esto ocasionó agresivas protestas de los jugadores boquenses, incluyendo agresiones verbales a los jugadores de River y una discusión general. Sorpresivamente, el árbitro cambió su decisión y otorgó saque de arco para Boca y amonestó a Vangioni por simular. En la repetición se pudo apreciar que en realidad la falta sobre Lionel Vangioni no existió, por lo que el penal habría sido cobrado injustamente, pero lo que sorprende es que el juez decidió retrotraer una decisión ya sancionada. El árbitro, Jorge Pérez Durán, no tuvo un buen desempeño en líneas generales además de este error.
Aparte de eso, no hubo mucho más para rescatar en los primeros 45 minutos, en los que los arqueros no tuvieron demasiado trabajo además de las llegadas mencionadas.
En el complemento, las acciones continuarían de la misma manera que al principio del partido, con ambos equipos tocando pero sin arremeter, Boca raspando y cometiendo faltas y remates con poca puntería.
Luego, llegó algo determinante para que el conjunto de Carlos Bianchi llegue al empate: el técnico interino Zapata decidió realizar algunos cambios cuestionables. El primero fue el ingreso de Kranevitter por Villalva para que acompañe a Ledesma en el mediocampo, dejando así a Lanzini y Simeone como únicos delanteros.
Con este cambio seguramente el técnico quiso cuidar el resultado, pero en cambio Boca se soltó y empezo a atacar más que antes y los únicos atacantes de la Banda quedaron muy solos arriba por lo que casi no tuvieron chances para liquidar el pleito.
Boca seguía buscando el gol y casi lo consigue en un centro para Riaño que el delantero estrelló en el poste izquierdo de Barovero.
Luego, al minuto 70, llegaría el empate de Boca por medio de un centro al ras del suelo de Zárate que Funes Mori no pudo rechazar y conectaría Claudio Riaño entrando en soledad por el medio, dejando sin chances a Trapito.
Zapata haría más cambios, pero fueron "puesto por puesto", es decir, no cambió el esquema como para ir a buscar el gol. Ingresarían Solari, Ferreyra, Vega y Andrada por Carbonero, Rojas, Mercado y Simeone, respectivamente.
Los minutos se consumieron lentamente y sin muchas sorpresas, exceptuando un centro de Acosta que se desvió en Vangioni y casi supera a Barovero pero el 1 logró manotearla al córner. Trapito tuvo un gran partido y se lo notó seguro.
Finalizado el partido, llegaría el momento de la tanda de penales para definir el ganador de la Copa BBVA Francés.
El primero en patear fue Claudio Pérez para Boca. El remate del ex-Belgrano dio en el palo y desperdiciaba la chance de ponerse en ventaja de entrada.
La réplica del Millonario estuvo a cargo de Vangioni, que definió contra el palo y River se puso arriba.
Luego pateó el defensor Forlín y Barovero adivinó sus intenciones, atajando el penal, dejando a Boca en 0.
El segundo penal de River fue ejecutado por Lanzini, que remató fuerte y arriba y estableció el 2-0 para la Banda.
El siguiente en patear desde los 12 pasos fue Sánchez Miño. El volante remató como Lanzini pero exactamente al ángulo, y sumó el primer penal para Boca y para así seguir con chances de alcanzar a River fallaba.
Sin embargo, esto no ocurrió. El Malevo Ferreyra fue el siguiente en patear y pateó a su derecha, mientras que Trípodi se lanzó hacia el lado opuesto. River quedaba 3-1 y si convertía el próximo penal se quedaría con la victoria.
El cuarto penal de los de la ribera fue convertido por Riaño de manera idéntica que el anterior, de Ferreyra.
Llegaba el turno del Lobo Ledesma, que disputaba su último encuentro con la banda roja en el pecho. Si convertía, le daba el triunfo a River y se despedía con broche de oro. Felizmente, su remate fue tan bueno que a pesar de que Trípodi adivinó sus intenciones no alcanzó a tocar la pelota y River se quedó con el cuarto superclásico del año, de cinco jugados.
Así, el Más Grande pudo pasar la prueba de ganar el primer partido en la era post-Ramón, nada más y nada menos que contra Boca Juniors y estiró a 5 el invicto frente a los primos. El campeón puede irse de vacaciones con alegría y enfríar la cabeza para pensar en la gran temporada que se avecina.